"El espíritu no va a ningún lado sin las piernas del cuerpo, y el cuerpo no sería capaz de moverse si le faltasen las alas del espíritu". José Saramago.
¿Porqué Citar a Saramago una vez más? No sé si es premeditado o si lo va a seguir siendo, pero me atrapa tanto su estilo de la continuidad que me recuerda siempre lo simplona que resulta ser la vida de cada uno, de cada uno que no tenga que luchar por su vida claro -países y gente hay de sobra en éste ejemplo-, pero no éste, no es el ejemplo que puedo citar ahora, no es la esencia de lo que hablo. Lo que hablo es verdaderamente simplón, exteriorizar balancines del pensar y sentir, tratando de encontrar un punto medular, en mí por ahora, en alguien más es posible.
He pensado en el sentido de escribir ésto, ¿porqué? y sobre todo de escribirlo públicamente; ¿a quién le va a importar? ¿quién lo va a leer? ¿alguien leerá ésto alguna vez? ¿hacia dónde me dirijo en ésta intención? Es probable que sólo quiera recrear mi escritura, ampliamente realizada y pocas veces mostrada... éste es el momento de exponer ¿alguien opinará algo? No lo sé, francamente no pienso en ello.
Sé y admito que hago ésto por ti, que de ésta forma escribo lo que no te digo, comparto lo que no te tengo y vivo lo que no te arrebato y lo que no te doy. Antier tuve un contacto contigo y de una manera tan evidencial me doy cuenta mucho más que en ningún otro momento, que ahora es tiempo de dejarte realmente, de tomar otro camino, otra distancia, y como ya lo he reconocido varias veces, no he podido, no puedo, no me soy fiel, me traiciono y vuelvo otra vez al mismo lugar, tu nombre vuelve otra vez al mismo espacio que la ha ocupado a mi mente en éste tiempo, sencillamente he pensado que va a ser algo poco menos que imposible lograr desprenderte de mí. Por éso ésta vez tomo otro recurso: que existas en otro plano, escribirte todo y absolutamente todo lo que te voy a querer decir, todo lo que te voy a dar, todo lo que te voy a permitir darme, sin excepciones, tu mundo estará aquí, pienso yo, más que en donde tu persona, porque uno no vive en donde su cuerpo le dice, si no donde más lo necesitan. Simplemente aquí en mis letras siempre podré vivirte, por más que ya no quiera, pero por menos de todo lo que lo deseo.
¡Sí! Es justo y preciso el sentido que le busco a ésta actitud escritora, no sé si el que le encuentro, pero sí el que le busco, saber cómo estar contigo y poder vivirte, a pesar de cualquier calamidad, con una y sólo una gran motivación -que es una motivación sólo por impulsar ésta actitud, no porque sea agradable-, la de la gran incertidumbre de saber que va a ser muy difícil, casi nulo, volverte a ver.
El tiempo es un gran vértigo, y le suele gustar no dejarnos ver.
¡Sí! Es justo y preciso el sentido que le busco a ésta actitud escritora, no sé si el que le encuentro, pero sí el que le busco, saber cómo estar contigo y poder vivirte, a pesar de cualquier calamidad, con una y sólo una gran motivación -que es una motivación sólo por impulsar ésta actitud, no porque sea agradable-, la de la gran incertidumbre de saber que va a ser muy difícil, casi nulo, volverte a ver.
El tiempo es un gran vértigo, y le suele gustar no dejarnos ver.